viernes, 5 de septiembre de 2025

EL CUMPLEAÑOS DE MI MADRE

 






EL CONFESIONARIO

Era un 26 de noviembre  y recuerdo esa fecha con vergüenza, con pena, y es que en serio, esa fecha al recordarla aun puedo ver la carita de mi padre y su mirada, para mi vergüenza, era su cumple años y era ya las 6 de la tarde y nunca lo recordé, no me paso por la mente, no lo hubiera recordado si ella no me hubiera hablado por teléfono para invitarme a su casa.

Recuerdo que mis cumpleaños, todos sin excepción ella donde estuviera, agarraba camión, taxi, pedía un aventón y llegaba a mi casa antes que despertara para cantarme las mañanitas en mi cama, era de seguro que despertaría con su voz y su mano acariciándome el pelo, mis cumpleaños fueron siempre así, después de despertarme tomábamos café, y me contaba siempre la misma historia, de como fue que yo nací, y me decia con voz chipilona - y quien acaba de nacer ?-, y se quedaba a desayunar y platicábamos de mi niñez, mis primeros pasos, me platicaba de como en un tiempo yo como de 3 años un grupo de gitanos, de esos que andan en la calle leyendo las manos, me querían comprar y le ofrecieron mucho dinero y joyas para convencerla, y mi madre al negarse, después requerían robar, no se que de cierto eran esas historias que mi madre me contaba, pero siempre eran las mismas, creo que de ahí viene mi terquedad, de contar las historias que a veces cuento y ahora las escribo.

Pero yo no, yo no recordé su cumple años y recuerdo esa llamada a un celular de esos viejos de los primeros que había de los NOKIA, que ahora les dicen de "cacahuatito", no existían los inteligentes, yo andaba de compras en un super, no se que cosa andaba buscando, alguna tontería de seguro, cuando sonó mi celular y era la voz de mi madre, esa voz que aun puedo recordar, era su voz tan particular, muy singular, a nadie he podido escuchar con esa voz que era solo de ella, sus palabras sonaban diferente, quizá porque es mi madre, pero podría reconocer su voz entre miles de voces de un coro al unísono, y le gustaba cantar y no lo hacia nada mal ahora que lo recuerdo, me dijo :

- Hola mijo, como estas ?- yo todo estúpido - Bien mama y tu como estas?, todo bien ?-, seguía ignorando esa fecha tan importante para ella - Estas ocupado ?, no te interrumpo ?, quería ver si quieres venir a comer pastel con chocolate ?- yo seguía todo pendejo, aun no me lo puedo perdonar - Y eso ?, quien cumplió años?-,y ella con su voz casi triste, de seguro lastimada por mi falta de atención, y sin justificar mi torpeza, pero ella si, ella con su amor me justificaba, y no solo eso, espero todo el día para partir el pastel conmigo, aun que mis hermanos le decían mi hermano no va a venir, de seguro le dijeron -el Jesse ni se acuerda que es tu cumpleaños, mama ya parte el pastel-,y ella siempre amorosa, tubo fe en mi, que llegara con un ramo de flores, o esperaba que llegara con mariachi a cantarle las mañanitas, y espero todo el día, y no lo recordé, y se vio en la penosa necesidad de marcarme para invitarme a comer de su pastel y que la felicitara en su cumpleaños,  sabia que mi olvido, y justifico toda mi estupidez, diciéndome con su voz tierna y suave, - Pues yo mijo, ven para partir el pastel, te estoy esperando - , me sentí como una mierda, miserable e ingrato, mal hijo y estúpido - Voy para allá mama, necesitas algo ?- pregunte como si con eso pudiera justificar mi torpeza, y llegue lo mas rápido que pude, y en efecto mi madre tenia su pastel intacto y solo esperaba que su hijo olvidadizo y mal agradecido, llegará para partirlo y compartir su pastel que era pequeño y sencillo, pero a mi, aun no se me quitaba la pena, la abrace y la bese, pero igual mi vergüenza no se me quitaba, ni tantito, ella seguía contenta y feliz de tener a su hijo ingrato comiendo con ella, trate de disipar esa incomodidad de mi fatal descuido imperdonable, pero igual tenia esa congoja que hasta hoy no puedo quitar y creo que nunca lo olvidare hasta que muera, ella, toda sencilla, amorosa de seguro leyó en mis ojos esa incomodidad de mi, y cambio de tema rápidamente y me pregunto - Como están tus manos ?- ella cuidaba mis manos, de guitarrista decía ella, que no permitía de ninguna forma que yo usara pala, o pico para que no se me maltrataran, y dejaba que mis hermanos pequeños hicieran esos trabajos mientras yo y ella tomábamos café y platicábamos, de esa forma cambio mi torpeza y mi descuido para verme las manos, y darme un beso en la palma de ellas para que las cuidara mucho, pues ella siempre creyó y con fe que yo seria un gran musico.

Pobre de mi madre, siempre tuvo grandes expectativas conmigo, siempre tuvo la esperanza de que cantara en grandes escenarios, y de seguro, si me viera ahora que sigo componiendo canciones, cantando y que solo llegan a 200 o 300 vistas en Youtube, con todo su amor de madre, se sentiría orgullosa de mi y justificaría con algún pretexto mi falta de éxito, como ella siempre me veía con sus ojitos de amor, justificaría y sin razón, mi falta de cuidado y mi falta de atención, mi torpeza y mi olvido en ese fatídico 26 de noviembre, pero ahora que lo pienso bendigo ese 26 de noviembre y le doy gracias al creador porque en ese día maravilloso, nació la mujer mas fuerte, inteligente y amorosa que es mi madre.











No hay comentarios: