El quitarle lentamente la cascara roja a un mango fresco
no puedo resistir la tentacion de imaginarme tu cuerpo
en esa parte dulce y tierna que me hace rendirme
caer de rodillas ante ti
postrarme en son de amor y paz
y con una atraccion horizontal
mis labios no pueden ignorar
la exquecites de tu olor y sabor
y entre la rendidura que deja ver
el interior de su anatomia
voy a mojarme en tus jugos
beberte
despacio
degustando cada sorbo
sabiendo que no habra poder que me separe
despues de haber saboreado tus aguas
la pulpa de tu cuerpo
quedo saciado
satisfecho
dejando las cascaras que te cubren
expuestas
tiradas
tu desnuda
tu alma seca y exprimida
hasta la ultima gota
el fruto a muerto lentamente
y me da su vida en un orgasmo.